¿Por qué Kim Hye-sung sigue en el banquillo? El debate que sacude a los Dodgers y a la afición coreana

El fenómeno Kim Hye-sung: ¿Por qué no juega más?

¿Sabías que Kim Hye-sung, a pesar de su impresionante promedio de bateo (.372) y su versatilidad defensiva, fue excluido otra vez de la alineación titular de los Dodgers? El 25 de junio, en el Coors Field de Denver, el equipo angelino enfrentó a los Rockies con su once de gala, pero el nombre de Kim brilló por su ausencia. Esta situación ha generado desconcierto entre la prensa y los aficionados, especialmente porque el lanzador rival era derecho, el tipo de pitcher ante el que Kim suele destacar. La decisión de Dave Roberts, el mánager, ha reavivado el debate sobre el uso extremo del sistema de ‘platoon’ y la gestión de los talentos asiáticos en la MLB.

El sistema ‘platoon’ de Dave Roberts: ¿Estrategia o terquedad?

Roberts es conocido por su adhesión casi religiosa al ‘platoon system’, donde la alineación se ajusta según la mano del lanzador rival. Sin embargo, la situación de Kim es especial: aunque ha demostrado ser productivo contra lanzadores derechos y zurdos, sigue siendo relegado al banquillo, incluso cuando otros titulares atraviesan crisis de rendimiento. Medios como Chosun y OSEN han destacado que Kim, con su .372 de promedio y OPS de .948, supera a varios compañeros que siguen siendo titulares a pesar de sus bajos números. ¿Es justo sacrificar talento por una fórmula rígida?

Reacciones de la comunidad: entre la indignación y el apoyo

En comunidades coreanas como Naver, Daum, DC Inside, FM Korea y PGR21, la indignación domina: “¿Cómo puedes sentar a un bateador de .370?” o “La terquedad de Roberts está perjudicando al equipo” son comentarios recurrentes. Sin embargo, una minoría pide paciencia, argumentando que la profundidad del roster de los Dodgers y la presión por el título justifican una gestión prudente. En foros estadounidenses, la frustración es similar, con muchos pidiendo más oportunidades para Kim y cuestionando la preferencia por jugadores como Michael Conforto, quien batea apenas .171.

Contexto cultural: los jugadores coreanos y el reto MLB

Para los lectores internacionales, es clave entender la presión que enfrentan los jugadores coreanos en la MLB. Kim, ganador de varios Guantes de Oro en Corea, llegó a los Dodgers con un contrato de 12,5 millones de dólares y grandes expectativas. La historia de los Dodgers con estrellas asiáticas como Chan Ho Park, Hyun-Jin Ryu y Shohei Ohtani hace que cada movimiento de Kim sea analizado al detalle. El uso del ‘platoon’ contrasta con su rol habitual en la KBO, donde era titular indiscutible, lo que añade un reto cultural y deportivo a su adaptación.

La prensa y los expertos opinan: ¿Cambio a la vista?

Artículos recientes de medios coreanos y estadounidenses subrayan la paradoja: Kim es uno de los novatos más impactantes de la Liga Nacional, pero su tiempo de juego es limitado. Analistas de Dodgers Nation y FanSided señalan que Roberts podría estar perdiendo partidos valiosos por no flexibilizar su estrategia. El debate se intensifica a medida que la afición y la prensa piden que el talento coreano tenga más protagonismo, sobre todo cuando otros titulares no rinden.

La importancia de Kim para la afición coreana y la MLB

Kim Hye-sung no es solo un jugador más para la afición coreana. Su llegada a los Dodgers ha generado un boom mediático y comercial, similar al ‘efecto Ohtani’ en Japón. Los Dodgers, conscientes del mercado coreano y la diáspora en Los Ángeles, han apostado por Kim no solo por su talento, sino también por su potencial para unir culturas y expandir la marca del equipo. Su canción de entrada, “혜성” de Younha, se ha convertido en un símbolo de identidad y orgullo para los fans coreanos y un puente cultural en el Dodger Stadium.

¿Qué sigue para Kim y los Dodgers?

Con la presión mediática y el clamor de la afición, algunos expertos creen que Roberts podría darle más minutos a Kim en la segunda mitad de la temporada. Sin embargo, la competencia interna y la obsesión por el título mantienen la incertidumbre. Para Kim, el reto no es solo ganarse un puesto en el line-up, sino también representar la resiliencia y el talento coreano ante el mundo. Su caso es un reflejo de los desafíos y oportunidades que enfrentan los jugadores asiáticos en la MLB moderna.